En el marco de la presentación de la comparsa de Ballesteros, Frutos Menor fue reconocido con el Premio Pedro Compañ en reconocimiento a su larga trayectoria.
Hablar de Frutos Menor significa hablar de historia de la fiesta. Socio desde hace más de cuarenta años y con profundas raíces en nuestra comparsa (su abuelo Mihuel fue presidente de los Americanos y perteneció a la directiva de los Árabes y de los primeros Ballesteros), ha ocupado muchísimos cargos directivos. En los años ochenta fue secretario; en los noventa, tesorero; a principios del nuevo milenio presidió una gestora y a partir de ahí formó un grupo de directiva, siendo presidente durante dos años más. En 2014 se repitió este patrón, liderando la gestora con la que se consigue la licencia C de la sede y configurando una nueva directiva que también preside en los años 2015 y 2016. Pero además, ha sido colaborador de otras muchas directivas (sin ir más lejos, de la actual) y también ha sido tesorero de la Junta Central de Fiestas.
En total, han sido más de diez años de presidencia, además del resto de cargos enumerados. Semejante currículum ya le valió el merecido Premio El Tito en el año 2012 y por fin, cinco años después, ha sido profeta en su comparsa con el reconocimiento del premio Pedro Compañ.
Trayectorias como las de Frutos Menor son las que hacen comparsa, las que hacen posible la fiesta. En síntesis, Frutos Menor ha sido el encargado de dar lustre a una comparsa en momentos difíciles y sobre todo, de facilitar las cosas al socio, siempre accesible y abierto a la colaboración. Para terminar, citamos algunas de sus palabras durante la presentación de cargos en el pasado año 2016: Ballesteros, este año cumplimos 50 años. Se han hecho muchas cosas, pero más importante que cumplir cincuenta años, lo es cumplir 51. Con el granito de arena de todos, iremos cumpliendo más y más años.
Imágenes cedidas por Antonio Gómez Torres, Jesús Redondo y Vicente Richart
Hablar de Frutos Menor significa hablar de historia de la fiesta. Socio desde hace más de cuarenta años y con profundas raíces en nuestra comparsa (su padre ya formaba parte de los Americanos), ha ocupado muchísimos cargos directivos. En los años ochenta fue secretario; en los noventa, tesorero; a principios del nuevo milenio presidió una gestora y a partir de ahí formó un grupo de directiva, siendo presidente durante dos años más. En 2014 se repitió este patrón, liderando la gestora con la que se consigue la licencia C de la sede y configurando una nueva directiva que también preside en los años 2015 y 2016. Pero además, ha sido colaborador de otras muchas directivas (sin ir más lejos, de la actual) y también ha sido tesorero de la Junta Central de Fiestas.
cimiento del premio Pedro Compañ.
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