Todo en general tiene un inicio y esta escuadra comienza en el año 1967, un año después de la fundación de la Comparsa de Ballesteros. Unos socios jóvenes, reunidos en el sótano del ya extinto bar “El Niño”, acuerdan la creación de una escuadra especial con cierta ilusión por darle a la comparsa un poco más de realce y elegancia.
La andadura de la escuadra se inició adjudicándole el nombre de Caballeros Cruzados, relacionados con las cruzadas que en su tiempo se realizaban en la llamada Tierra Santa, para situarla en un momento dado de la historia de España.
En primera instancia se realizó un cambio de traje diferente al de la comparsa. Fue con este primer traje cuando se obtuvo el primer premio en 1968, que por aquel entonces se llamaba 1er Galardón.
La intención era mantener los trajes durante dos años y así seguir hasta que fuera posible, momento que terminó cuando fueron apareciendo más escuadras especiales en la comparsa.
Los trajes siguieron una evolución, fueron en sus inicios más sencillos hasta que con el tiempo fueron ganando en complejidad debido también a la competencia con otras escuadras especiales de las diferentes comparsas de Villena.
Colaboradores incansables con la Comparsa de Ballesteros, muchos de nuestros miembros han ostentando la presidencia en varias legislaturas han sido componentes directivos en casi todas las directivas que se han formado en la comparsa, llegando a apoyar en algunas ocasiones a muchos niveles, desde organizativos como en el Ecuador Festero del 2008, como de otro tipo.
UN POCO DE HISTORIA
Se pueden considerar en la existencia de las escuadra tres etapas diferenciadas en su historia. La primera que llega desde 1967 a 1979, en la que existió lo que vamos a denominar la búsqueda y situación de la misma en la Fiesta, pues hubo varios cambios, ajustando el nombre al cambio de traje, como en 1970 el nombre de Verdugos, con una muy buena acogida por parte del público, y en los años 1974 y 1975, con la denominación de Escuadra de Paladines para tener un mejor acorde con el diseño del traje.
También con este traje nuestra escuadra fue galardonada con el Primer Premio de Escuadras Especiales de nuestras fiestas. Nombres y desfiles que se mantuvieron durante dos años puesto que era el sistema de actuación en las fiestas acordado por los miembros de la escuadra y la directiva de la comparsa.
Otro primer premio es también conseguido por nuestra escuadra al final de esta etapa en 1976, ya con nuestro nombre acorde al diseño.
En la segunda y más larga etapa, entran a formar parte de la escuadra algunos socios nuevos y en el año 1979 volvemos a conquistar el Primer Premio de Escuadras Especiales. Es en esta etapa cuando la escuadra aun con las mismas normas que se establecieron en un principio, parece más sólida en todas sus formas, humanas morales y económicas.
Aparte del premio a la mejor escuadra, en este año 1979 pudimos contar también con el Premio al Mejor Cabo del Bando Cristiano, otorgado a Antonio Torres Catalán.
En el año 1981, otro extraordinario traje y un brillante desfilar, consiguieron para la escuadra otro primer premio en las fiestas de Villena.
Se consolida, a partir de ahora, más si cabe, la escuadra con la compra de una sede sita en la calle José Zapater, a unos pasos de la sede de la Comparsa de Ballesteros.
Cabe mencionar que la creación de uno de nuestros trajes estrenado en las fiestas de Villena desfilara en las fiestas de Benisa con un gran éxito obtenido allí, llegando incluso ese traje a convertirse en el traje oficial de una comparsa de esa ciudad.
Celebró la escuadra el 25 aniversario y, aparte de los actos y actividades que se realizaron, se estrenó el pasodoble dedicado a la misma compuesto por Santiago Quinto de Albatera, “Cruzados de Villena”, interpretado por la Banda Municipal de Villena en un concierto en la Plaza de las Malvas, estando al mando el maestro Pellicer. Posteriormente fue presentado junto con la marcha mora “Selyúcidas”, de la escuadra con el mismo nombre, con quienes contrajimos una buena amistad, realizando junto a ellos una fiesta abierta al público en La Cábila de los Moros Nuevos.
También cabe reseñar que fuimos una de las escuadras de Villena pioneras y colaboradoras en el inicio de las Fiestas de Moros y Cristianos de Quintanar de la Orden en Toledo, donde acudimos en varias ocasiones a desfilar en sus fiestas.
En otros aspectos y fuera del ámbito festero, creamos un equipo de fútbol sala que participó en los campeonatos y famosas 24 horas del colegio Príncipe Don Juan Manuel, siendo campeones durante todas las temporadas.
Gran participación en los desfiles festeros con la comparsa, queremos destacar el desfile de la Retreta en el que siempre reunimos una gran cantidad de personas, destacando como ejemplo la Retreta de los punkis, en la que fuimos más de cien participantes.
Incansables también en las Dianas, siempre apoyando a nuestra comparsa.
Con la aparición de nuevas escuadras en la comparsa, empiezan a alejarse más los años en poder salir a desfilar en las fiestas por causa de las normas de la Junta Central y el número de componentes de la comparsa, por lo que empieza la tercera etapa en la que se sigue saliendo pero con más dificultades.
En esta etapa, aunque se siguen realizando varios trajes, con el distanciamiento de los años, los componentes de la escuadra optan por hacer un cambio: seguir siendo Escuadra de Cruzados pero sin desfilar con traje de escuadra especial, hecho que cambiará el próximo año 2017 en el que para celebrar nuestro cincuentenario, la Escuadra de Cruzados volverá a desfilar en todo su esplendor por las calles de Villena.
Y TERMINAMOS
Siempre nos hemos mostrado sensibilizados y participativos en otros eventos dentro y fuera del ámbito festero, como acompañando a otras escuadras en sus celebraciones, como acudiendo a certámenes, expo-fiestas, ferias y otras actividades, tanto en Villena como fuera, por ejemplo en Quintanar, Valencia, etc.
En el seno de la escuadra hemos vivido momentos de todo tipo: homenajes, cenas, comidas, fiestas… Y hemos compartido alegrías y momentos más tristes.
Quisiera hacer mención desde aquí y recordar a los componentes que han fallecido a lo largo de la existencia de esta escuadra, que esperamos tenga vida por muchos años más. Estas personas a las que me refiero son Miguel Sánchez Gabaldón, más conocido como Figuerola, José Ballester Algarra, conocido como Pepe el Capota, y Francisco Ugeda El Batallas, personas que espero siempre queden en nuestro recuerdo ya que han sido componentes que dejaron una gran huella en esta escuadra.
A la Comparsa de Ballesteros, con el gran amor que tenemos hacia ella, queremos desearle una maravillosa celebración del 50 aniversario y que tenga el gran futuro que se merece, dentro de los más prometedor y exitoso en las Fiestas de Moros y Cristianos de nuestra ciudad de Villena.
Pedro Torres Catalán